El propietario ha vivido toda su vida en este caserío de tres plantas. Desde que se jubiló, utiliza el sótano como taller para sus actividades favoritas. Además, en la planta baja tiene el comedor y la sala de estar; y, por último, en la segunda planta dispone de su dormitorio.

Tiene molestias en la pierna y el mero hecho de subir las escaleras le resulta una tarea dolorosa. No está dispuesto a dejar sus hábitos ni a cambiar la distribución de su casa para no tener que usar las escaleras.

Para seguir disfrutando de su casa y de sus aficiones, sin costosas e incómodas obras, le hemos instalado una silla Curve, diseñada para tramos curvos, perfecta para hogares particulares por su tamaño compacto, bajo consumo y fácil manejo.